Un solo acto de compasión y solidaridad no va a cambiar todo el mundo, pero, sin duda, puede dejar una impronta muy valiosa en los corazones y marcar un precedente. Así sucedió con la historia de un anciano de Ecuador y su maravilloso acto de amor con un perrito callejero.
Una mujer, Pamela…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Abuelito hace un conmovedor gesto con este perro callejero: le da agua con sus propias manos.