Todos alguna vez jugamos con nuestros padres, amigos o familiares a adivinar qué mano era la que tenía una sorpresa. Y cuando elegíamos bien, saltábamos de felicidad… no así cuando nos equivocábamos. Y aunque parezca un juego digno de humanos, también los animales parecen divertirse con…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Debía hallar un premio y eligió la mano equivocada. Apenas se da cuenta, su cara se transforma.