Hacer un “dorodango” es un pasatiempo tradicional de los niños japoneses, que se ha convertido en una forma de arte. El dorodango es una bola hecha de barro y polvo, meticulosamente refinadas hasta convertirlas en “hikaru dorodango”: esferas perfectas, brillantes y pulidas que puedes tardar…
Ahora puedes leer el artículo de Bored Panda sobre El arte japonés de pulir bolas de barro hasta la perfección es muy satisfactorio.