El reloj da pasado las 12 y Stephen Hawking, el célebre físico inglés, se inquieta. Está frente a la puerta de un elegante salón de la escuela Gonville y Caius de Cambridge, expectante, y rodeado de esterlinas, globos y variados bocadillos. No puede faltar el champán, claro, la bebida…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre El día en que Stephen Hawking organizó una fiesta con champán, pero a la que nadie llegó.



