La rutina de Jacob es simple. Duerme en una esquina, bajo una lona. Al despertar, se sienta en la acera y mira fijamente la puerta de un local. Pasa el día completo mirando. Llega la noche y cuando ya no da más, se acuesta nuevamente. Así pasan todos su días.
Las personas que pasan a su lado…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Espera todos los días a su dueño que murió al intentar separar una riña. Es el «Hachiko» de Sonora.