Hace unos años, llevar barba era casi sinónimo de ser poco más que un indigente. Dejarse una ligera sombra en el rostro era síntoma de poca higiene y de odiar cualquier cosa que empezase por Gillette. Eras un perroflauta; un antisistema que solo quería ver arder el mundo.
Las cosas fueron…
Ahora puedes leer el artículo de Cabronazi sobre Estas son las razones psicológicas por las que los hombres llevan barba.