Me encantan los finales felices, y es que sabemos que las personas pueden ser muy crueles más en un entorno laboral, pero existen distintas formas de afrontar el rechazo, sentarse a llorar, o secarnos las lágrimas y trazarnos nuevas metas.
Collette Divitto es el ejemplo perfecto de…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Fue rechazada en varios trabajos por tener síndrome de Down. Ahora hace galletas y es su propia jefa.
