Ahora puedes leer el artículo de La Voz del Muro sobre La calle del ahorcado.
En el siglo XVI, existió un misterioso hombre rico, callado y triste que acostumbraba salir en las noches de su hogar hacia el Convento de San Francisco para entrar a la capilla del Señor de Burgos y arrodillarse a rezarle llorando y gimiendo. Nadie le preguntó las culpas que le…