A nuestros padres les encantan nuestras fotos. Si por ellos fuera, nos estaríamos haciendo selfies cada cinco minutos solo para mandárselas, especialmente mientras comemos, llevamos rebequitas o cruzamos un paso de cebra en verde.
Gracias a dios que no se terminan de manejar con Instagram, y…
Ahora puedes leer el artículo de Cabronazi sobre La joven mandó esta foto a sus padres descuidando un ligero detalle.