No sé a ustedes, pero mi mamá desde niña siempre trató de inculcarme el ser una persona bien portada y eso implicaba no decir groserías, claramente falló miserablemente en su crianza porque hoy en día siendo la mujer adulta que soy digo groserías casi tan seguido como respiro.
Resulta…
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Personas que dicen muchas groserías son los mejores amigos. No es invento mío, lo dice la ciencia.