Jessica Benítez es uno de esos ejemplos en los que querer, efectivamente, se convierte en el primer paso para llegar a poder. Su estilo de vida era tremendamente poco saludable: estaba obsesionada con la televisión; tenía una dieta absolutamente insana; no se movía del sofá más que para ir…
Ahora puedes leer el artículo de Cabronazi sobre Pesaba 145 kilos y, en tan solo un años, perdió más de 80: así está ahora.


