Antiguamente era normal prohibir la lectura de ciertos libros que eran considerados por escuelas, la iglesia o el estado como “malos” o “tóxicos”. Todo esto, claro, dependía de las agendas de cada quien y qué tanto pretendían limitar los conocimientos del resto del mundo a su gente….
Ahora puedes leer el artículo de UpSocl sobre Vetan “La Bella Durmiente” y “La Caperucita Roja” de escuelas españolas. Serían tóxicos y sexistas.